LA GRAN PREGUNTA QUE SIEMPRE DA VUELTAS ES… Parte 1
“¿Y cómo sé que esa persona realmente es para mí?” Y para ser honesto, nunca pude entender del todo ese tipo de pregunta. No sé si porque soy de otro tiempo (reconozco que en estos temas soy chapado a la antigua) o simplemente porque aprendí que el amor no se razona demasiado, más bien no es un asunto racional, es un tema que compete al corazón, y aunque no lo creas, Dios nos hizo de esa manera.